Como lo hemos visto, las guerras modernas entre las potencias mundiales ya no se hacen con armamento y ataques directos, sino a través de la economía, y que con sus riquezas e industrias construyen o destituyen países enteros, por eso llama la atención que en las últimas semanas hemos visto el desplome de las bolsas de valores en el mundo, principalmente en Asia donde la Bolsa de Shanghái en China, afecto a los mercados bursátiles de Tokio, Hong Kong, Singapur, Seúl y Sidney, producto de la devaluación del “yuan”, moneda oficial de los chinos, y la contracción de la economía y la debilidad del sector manufacturero.