Opinión

Sin lugar a dudas está acostumbrado a dar el golpe y a esconder la mano. Así ha sido toda su vida, siempre colocando a los demás por delante para que no le toque sufrir los daños. Lo cierto es que la mayor parte de su base social darían lo que fuere por protegerlo, por defenderlo, por enfrentar

(Para sobrevivir a la pandemia de COVID-19 debemos enclaustrarnos; sin embargo, para vivir hemos de desvivirnos, dándonos aliento unos a otros y facilitándonos la vida entre sí)

Cada día el país sobrevive a una situación muy triste. Poco se le cree ya al presidente. Que si le dio coronavirus, no, que fue una ataque cerebral, dicen que está fingiendo, exhiben fotografías donde

El hecho de que México se aproxime a los dos millones de contagios y casi 160 mil muertes por la Covid-19, un par de cifras que estremecen porque revelan un océano de dolor nacional, parece sintetizar,