Opinión

Resulta increíble la mendicidad de una operación que presume de ser honesta cuando en realidad ha acumulado una buena cantidad de dinero desde que hace negocios con el sector energético del país. No sé cuánto le deba el Presidente de la República, porque con sus desplantes y su voracidad la debió poner de patitas en la calle desde hace mucho tiempo no tan solo por corrupción, también por ineficiente e irresponsable en la conducción de los proyectos más importantes del sector.