LOS SANTOS DE TEPITO
A muchos no gustara lo que aquí escribiré y por ello seguramente seré blanco de todo tipo de dicterios, descalificaciones, y hasta uno que otro recordatorio materno. No es que busque provocar ese tipo de reacciones, pero cuando un periodista vierte opiniones contrarias al interés de quienes son referenciados en una nota las cosas no resultan del todo agradables para los protagonistas, y en el caso que nos ocupa diré que no puedo opinar de otra forma