CAMINO SIN RETORNO
Hay decisiones que se tienen que tomar que algunas veces no tienen regreso. Sobre todo cuando este tipo de resoluciones afectan a la vida de miles y quizá millones de habitantes de un país como el nuestro.
Información útil para la toma de decisiones
Hay decisiones que se tienen que tomar que algunas veces no tienen regreso. Sobre todo cuando este tipo de resoluciones afectan a la vida de miles y quizá millones de habitantes de un país como el nuestro.
Nuestro sistema de justicia ha dado muestras de ser imperfecto desde hace mucho tiempo. Y no es que tenga intención de hacer un señalamiento en específico, simplemente es que la justicia en México es una entelequia porque solamente existe en nuestra imaginación y en la de aquellos que la reseñan, porque la verdad es que cada día nos enredamos más y pocos resultados a satisfacción de los mexicanos encontramos en las decisiones de quienes debieran protegernos y que solamente se contentan con dejar pasar las cosas.
Muchas cosas pensaran aquellos que tuvieron que cargar con la derrota en las pasadas elecciones. Y no es que por ello habrán de tener remordimientos por lo que no se pudo alcanzar, simplemente es que las victorias tienen muchos padres y madres, pero las drogas lo único que dejan es un sabor amargo y muchas frustraciones. No debe ser fácil digerir una derrota dolorosa como la que obtuvieron los tricolores, y por el otro lado la embriaguez de la Victoria también ha causado sus efectos que provoca esa locura que algunas veces hace que los simples mortales pierdan el piso.
El mismo escenario. Si bien es cierto que las crudas electorales son provocadas por las derrotas, también lo es que las ambiciones son las principales causantes de las mismas. Las causas de las derrotas pueden ser muchas, pero todas encuentran un mismo componente.
Mucho se ha escrito acerca de nuestro sistema de partidos y la incipiente democracia que tenemos desde que el dinosaurio dejo el poder en manos de los panistas, quienes no supieron o no entendieron que hacer con él y para qué servía. Pero también hay que señalar que la circunstancia d poder cambia de agudo al tiempo, el modo y quien lo ejerce, y así el poder paso de noche en el lumínico día en que Vicente Fox alcanzó el triunfo. Después vendría Felipe Calderón y sus obsesiones de poder para que enfrente entendieran quien mandaba. Por eso mando al Ejército Mexicano a las calles para combatir al narcotráfico y a la encubierta organizada, y para que lo entendiera el de enfrente que siempre se dice defraudado.
En este país hay muchas organizaciones que se mueven al margen de la ley. Sobre todo en esos territorios que se consideran “"tierra de nadie” por encontrarse en medio de las delimitaciones municipales o estatales. Este fenómeno de las grandes zonas urbanas es una lamentable realidad porque en esos lugares se acostumbra hacer valer la ley del más fuerte.