Opinión

Ni siquiera sabemos todavía de qué tamaño será el golpe económico y sanitario en México, pero el presidente Andrés Manuel López Obrador insiste con un empecinamiento, digno de un mejor rumbo y destino, en que la recuperación será rápida y para ilustrarlo utiliza el símbolo de la V, que no se sabe si es la V de la victoria o la V del virus.

Sin lugar a dudas el liderazgo de Andrés Manuel López Obrador sigue siendo un enorme peso para la dirigencia del Movimiento de Regeneración Nacional, pero sobre todo para los integrantes del gabinete central y ampliado quienes normalmente no toman decisiones hasta que el Presidente de la República les autoriza.

Cuando el presidente Andrés Manuel López Obrador se encuentre en cosa de días cara a cara con su colega estadunidense, el magnate republicano Donald Trump, llevará la representación de un México herido, lastimado, vulnerable, violento y pobre, mucho más pobre del que conocieron y representaron sus antecesores.