Opinión

Prolijo en calificativos, descalificaciones, categorizaciones inútiles, alusiones clasistas o arcaicas referencias a las viejas corrientes ideológicas que otrora protagonizaron las grandes confrontaciones de la historia de México, el discurso de López Obrador nos inserta siempre, de manera directa o soterrada, en una trama de confrontación y polarización,

Como una “declaración de hostilidad del gobierno” califica Héctor Aguilar Camín la sanción impuesta por la Secretaria de la Función Pública a la revista Nexos. Vamos le aplicó una inhabilitación por dos años ordenando a dependencias y entidades federales “abstenerse de aceptar propuestas o celebrar contratos con la empresa Nexos Sociedad, Ciencia y Literatura, S.A de C.V.”

Viene ahora el tiempo de los dimes y diretes, del yo no fui, del sí tu fuiste, del a mí que me esculquen, del yo no sé nada, del soy inocente, o del todo es parte de un complot, del todo se reduce a una vendetta o simple y llanamente a una vulgar persecución en busca de una urgente resurrección. ¿Y la justicia, apá? Bien, gracias. Otra vez será.