Disculpe Ud., pero no me acomoda el papel de "hombre engañado", vamos, no me veo con "cornamenta", rechazo las tomadas de pelo, por esa razón es que no acepto la nueva versión del presidente sobre la "verdad histórica"

Todo haría suponer que el PRI está condenado al fracaso en este sexenio, que los verdugos que ejecutarán a Lozoya y Duarte colgarán sus cabezas en picota para ser mostrados a la comarca como triunfo de los caballeros de la mesa de la 4T en contra de los “Orcos de la corrupción”. Mencioné ayer que este PRI es un verdadero traje a la medida, mejor dicho,es una guayabera muy cómoda para el Presidente.

Lozoya y Duarte, dos fichas que reflejan de que tamaño fue el saqueadero en el pasado sexenio, uno que arroja un tufo de sospecha de que a el mero jefe de esa mafia (Peña Nieto) no llegara el brazo de la justicia. Todo indica, que el ex presidente continuara en el muro de los que fueron ex mandatarios y gozan de cabal impunidad, una sospecha que se consolida gracias a ese invisible manto protector que el presidente López le ha brindado... por razones políticas.

El porcentaje de mexicanos que han perdido la vida por el covid y que guardan relación entre el nivel escolar y éste hecho no es menor, poco más del 70 porciento de los mismos no concluyeron la primaria,

Me encanta la historia por ser la gran maestra, no tenemos que ir muchos años hacia a tras, Bill Clinton es el personaje y siendo presidente acuño aquella anécdota del letrero en su oficina oval, uno que le recordaba algo así como "es la economía, estúpido"... y en estos tiempos se aplica en mas de un jefe de estado.

Donald Trump creó su fortuna en el negocio de la construcción, heredó de su padre esa habilidad, la familia Trump levantó una serie de multifamiliares, departamentos de interés social, pero Donald fue más allá, compró inmuebles, les invirtió dólares y los convirtió en edificios de lujo, después, Trump encontró una mina de oro en los casinos, perdió y ganó, pero se le reconoce por ser un negociador sin escrúpulos, acostumbrado a ser el centro de atención, un junior diríamos, capaz de hacer lo que sea con tal de obtener lo que quiere.