Si tuviéramos que decir - sin dramatismo - cual fue la constante de la semana 38 del año 2020, particularmente del cabalístico día 20 de septiembre del año 2020, definido en una palabra sería “sangriento” y no por derramamientos de sangre solamente, que de eso ya tenemos bastante en el país, sino por que la sangre campea en el fondo de las noticias y las reacciones de los políticos.

Alrededor de cuarenta y cinco minutos bastaron al Presidente Obrador para leer el mensaje sobre la obligación de informar al pueblo de México,

Los partidos políticos en todos los países, acreditan la pluralidad ideológica necesaria en la democracia de los pueblos, mientras mas diversas ideologías haya en un pueblo, más alternativas de participación ofrecen a los ciudadanos, a pesar de que el costo pueda ser la pulverización de las fuerzas, todo ello vale y es indispensable en un escenario regular de convivencia democrática.

En el discurso del poder ejecutivo nos ha machacado que la corrupción es el gran mal que aqueja a México, sin duda los tentáculos de ésta han penetrado todas las esferas del país. El discurso que la señala como la madre de todos los males también ha servido como lema y bandera de campaña, convence y tiene mucho de cierto y de verdad, ha minado a muchas instituciones, pero a pesar de ellos el país ha avanzado.

Ya déjense de estar inventando cosas, de estar sacando cortinas de humo para distraernos de la

Neville Chamberlain el primer ministro inglés, que firmara los acuerdos de Múnich con Hitler y