Opinión

Viene ahora el tiempo de los dimes y diretes, del yo no fui, del sí tu fuiste, del a mí que me esculquen, del yo no sé nada, del soy inocente, o del todo es parte de un complot, del todo se reduce a una vendetta o simple y llanamente a una vulgar persecución en busca de una urgente resurrección. ¿Y la justicia, apá? Bien, gracias. Otra vez será.

Como una “declaración de hostilidad del gobierno” califica Héctor Aguilar Camín la sanción impuesta por la Secretaria de la Función Pública a la revista Nexos. Vamos le aplicó una inhabilitación por dos años ordenando a dependencias y entidades federales “abstenerse de aceptar propuestas o celebrar contratos con la empresa Nexos Sociedad, Ciencia y Literatura, S.A de C.V.”

¿Cuántos amigos, amigas, cuates, cuatas, compadres y comadres del licenciado López Obrador trabajan en el gobierno de la 4T?

Sin lugar a dudas Andrés Manuel López Obrador es un consumado maestro en eso de desviar la atención del gran público de los principales problemas del país. Hasta ahora México está a la deriva en materia económica, y antes que intentar estrategias contracíclicas que aminoren el costo político económico de la pandemia del coronavirus y los saldos del decrecimiento del 18.9 previsto por los especialistas, se mantiene llevando la atención del gran público hacia otro tipo de eventos para evitar que su imagen se siga deteriorando a causa de la manifiesta ineficiencia gubernamental que encabeza.