La Cámara de Diputados ha sido severamente criticada por los constantes viajes que realizan sus conspicuos integrantes, sobre todo al extranjero, con todos los gastos pagados y con cuenta a los contribuyentes. Eso ha generado severas críticas por la forma discrecional que utilizan los legisladores para decidir a donde quieren ir, cuantos van a ir, el tiempo que estarán en cada destino, y los viáticos que requieren para ello sin que los mexicanos sepamos en que nos benefician esos viajes que se pagan con nuestro dinero. Para decirlo más claro, lo que hagan los representantes populares nos sirve solamente para lo mismo que mandar una vaca a Suiza para que aprenda cómo puede producir leche de mejor calidad.