En nombre del poder se han cometido innumerables y execrables decisiones que han provocado caos en los esquemas gubernativos del mundo. México también ha tenido episodios lamentables que la historia no puede borrar de sus fastos como fueron los asesinatos de Agustin de Iturbide, Vicente Guerrero, Francisco I. Madero, Emiliano Zapata y Francisco Villa, por mencionar algunos. El poder siempre ha subyugado al ser humano y lo ha obligado a tomar decisiones contrarias a las más elementales normas de la convivencia.