Siempre he pensado que México nació de un acto de corrupción. Cuando Hernando Cortés instauró el primer Ayuntamiento del país en la Villa Rica de la Vera Cruz, decidió incursionar tierra adentro sobornando a sus capitanes, a quienes ofreció un porcentaje de lo que “rescataran”, que era la forma en que ellos definían el acto que ahora conocemos como robo, que no es otra cosa que el apoderamiento de un bien ajeno.

Andrés Manuel López Obrador se sintió mal la noche del lunes y en la madrugada del martes tuvo que acudir al hospital para que le hicieran una revisión que suponía sería de rutina, llegando cerca de las dos y media de la mañana a Médica Sur. Desde el momento en que arribó los médicos supieron que estaba infartado y de forma inmediata le brindaron atención.

Primer año del Presidente Enrique Peña Nieto y resultado desfavorable. No es que haya comenzado con el pie izquierdo, es que tenemos un entramado jurídico arcaico. Peña Nieto sabía lo que le esperaba y  que las cosas no funcionarían, pero tenía que arriesgarse y consensuar con las oposiciones un nuevo modelo de desarrollo basado en las coincidencias. Por eso nació el Pacto Por México, ese que ahora pareciera condenado a la muerte.

Sin lugar a dudas el movimiento magisterial ya rebasó con mucho lo que hicieron sus homólogos a finales de la década de los cincuenta del siglo pasado. Y eso significa que pese a que algunos de ellos cometieron diversos delitos o  fueron acusados de cometerlos, la mayor parte de sus liderazgos fueron a parar a la cárcel.

De Felipe Calderón y sus principales colaboradores se dijeron muchas cosas, se dicen otras y se dirán más, pero lo peor es que la mayor parte de ellas son verdaderas. Resulta inverosímil que en menos de una semana se hayan acumulado notas referentes a los yerros cometidos por Felipe Calderón Hinojosa, su hermana y algunos de sus colaboradores más cercanos, y lo previsible es que en los siguientes días sigan manteniendo interesada a la opinión pública.

“No es la Ciudad de México la que debe convertirse en una zona de negociación, de absolutamente toda la República” espetó Miguel Angel Mancera, Jefe de Gobierno, al precisar la postura que según sus propias palabras le ha señalado la Secretaría de Gobernación. Y es que los maestros tienen ya varios meses causando graves afectaciones a los habitantes de la Capital de la República con sus paros, mítines, plantones y cercos, que presuntamente organizan para llamar la atención y que el Gobierno Federal desista de poner en marcha la reforma educativa.